Este manual, elaborado por la Concejalía de Bienestar Social, da a conocer el trabajo de los equipos de Familia e Infancia y los procesos de notificación en casos de desprotección infantil
Los primeros 2.500 ejemplares impresos se distribuirán entre ONG, profesionales de diferentes ámbitos relacionados y menores de la capital grancanaria
Durante el año 2023, los equipos de Familia e Infancia atendieron a un total de 1.554 menores de los cinco distritos de Las Palmas de Gran Canaria
Las Palmas de Gran Canaria, lunes 15 de julio de 2024.- La Concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha lanzado esta semana la ‘Guía Informativa de los Equipos de Familia e Infancia’. Un documento con el que se da a conocer el trabajo de los equipos municipales especializados en la atención a la infancia y la familia, y que puede utilizarse para conocer los procesos de notificación ante cualquier situación de desprotección de un menor.
Este manual, elaborado por técnicos municipales de Bienestar Social y redactado con lenguaje accesible, será distribuido a profesionales del ámbito educativo, sanitario y social, así como a niñas, niños y adolescentes de la capital grancanaria.
La Concejalía de Bienestar Social ha comenzado con la distribución de la guía, tras hacer entrega en la Casa del Marino de las primeras copias a la presidenta del Colegio Oficial de Trabajo Social de Las Palmas, María Dolores Fabelo, y a María Jesús Armas, miembro de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de la Psicología de Las Palmas.
La responsable del área, Carmen Luz Vargas, ha manifestado que “la publicación de este documento representa un paso significativo en nuestro compromiso con la protección y el bienestar de los menores. Desde el Ayuntamiento estamos dedicados a trabajar para crear entornos donde las niñas y niños de la ciudad puedan crecer en contextos favorables para su desarrollo”.
Por otra parte, Vargas ha querido agradecer la labor llevada a cabo por los equipos que han trabajado este texto, destacando a su vez que “con esta guía no solo se informa sobre nuestras actuaciones y metodologías, sino que también subraya la importancia de la colaboración entre familias, profesionales y ciudadanía para garantizar el respeto y la protección de los derechos fundamentales de las niñas, niños y adolescentes”.
Un total de 2.500 ejemplares impresos serán repartidos entre las ONG y profesionales de diferentes ámbitos como la salud, la educación y los servicios sociales, entre otros. Esta cantidad se sumará a su distribución en formato digital, permitiendo así llegar a un mayor número de personas interesadas y asegurando que la información esté disponible de manera accesible.
Asimismo, el formato electrónico da la posibilidad de acceder de manera directa a una hoja de notificación en la página web del Ayuntamiento, a través de un enlace directo o mediante código QR, ante posibles situaciones de maltrato o desprotección infantil
Mediante la puesta a disposición de este manual, la Concejalía de Bienestar Social reafirma su compromiso con la protección de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, proporcionando un recurso tanto para las familias como para los profesionales que trabajan en este ámbito.
Cabe recordar que Las Palmas de Gran Canaria está reconocida por Unicef como Ciudad Amiga de la Infancia desde el año 2021. Un reconocimiento obtenido por el compromiso de la administración local para mejorar las políticas públicas desde un enfoque de los derechos de la infancia, equidad, participación y rendición de cuentas.
Protección y seguridad para menores
La labor principal de los equipos de la Unidad Técnica de Familia e Infancia es la protección de las familias, asegurando que los menores permanezcan junto a ellas en un entorno seguro y protegido.
Durante el año 2023, los equipos de Familia e Infancia de los cinco distritos municipales intervinieron en 1.087 familias, atendiendo a un total de 1.554 menores entre niñas, niños y adolescentes. A través de esta guía, se pretende explicar de manera detallada cómo se lleva a cabo este trabajo fundamental.
Los profesionales que conforman este servicio realizan una variedad de actuaciones que se encuentran divididas en tres áreas principales: preventiva, minimizando los factores de riesgo y potenciando los factores de protección; intervención del caso, proporcionando tratamiento directo a las niñas, niños o adolescentes y sus familias; y control y apoyo, ofreciendo una aproximación y cercanía para explicar las consecuencias y ofrecer un soporte continuo.
Estas funciones incluyen la valoración, en la cual los trabajadores sociales y psicólogos detectan y verifican situaciones sociofamiliares de vulnerabilidad o riesgo de exclusión social en menores. Asimismo, intervienen junto con educadores familiares, trabajando con los menores y sus familias desde un modelo de competencias y apoyos para su desarrollo integral y la satisfacción de sus necesidades.
En la guía se destaca la relevancia de estos equipos y cómo protegen los derechos de los menores en el municipio, subrayando que todas las niñas y niños tienen derechos fundamentales que deben ser respetados y protegidos por los Gobiernos, las familias y la comunidad en general.
También se proporciona una clara explicación sobre los derechos y deberes de los menores, tales como el derecho a la educación, a la salud, a jugar y a vivir sin violencia, y las obligaciones correspondientes de sus padres, madres y la comunidad para garantizar estos derechos.
Entre otras cuestiones, en el documento se explica cómo los equipos evalúan las situaciones familiares utilizando una metodología que incluye la observación y el diálogo con todas las partes involucradas, desde padres y madres hasta educadores y profesionales de la salud.
Esta toma de decisiones, dependiendo de la gravedad de la situación, se estructura en el servicio a través de un «semáforo» de colores, mediante el cual se toman decisiones para garantizar el bienestar de los menores: verde, cuando todo está bien y las necesidades básicas están cubiertas; naranja, cuando se necesita intervención para prevenir o mitigar riesgos; y rojo, en situaciones graves que pueden requerir la separación temporal del menor de su familia para su protección.
La guía también enfatiza la colaboración con profesionales y personas en la comunidad —como profesores, pediatras o vecinas y vecinos—, quienes juegan un papel crucial en la identificación de situaciones de riesgo y en la protección de los menores.
El deber de la ciudadanía de notificar una situación de desprotección viene recogido en la ley de protección a la infancia (Ley 8/2021, también conocida como LOPIVI o ley Rhodes), la cual impone a las administraciones públicas el deber de informar sobre los procedimientos disponibles para su aplicación y los recursos disponibles.